Fotografía de Aino Kannisto |
COOKING
Imaginé agarrarlo como a la carne picada
con todos lo dedos
para que se escape
deslizándose
amoldándose a las huidas.
O cortarlo en pedacitos
después de pelarlo
como al tomate
mientras se resbala
y me hace pensar
que es mejor vestido
sin tocarlo
mucho,
sólo consumirlo
para refrescarme.
Y si no, comerlo como al alcaucil
untarlo
chuparlo
deshojándolo.
O esperar
a que asome
con la misma presura
con la que me someto
a esas plantas que sólo florecen
si se las cuida excesivamente
para después no durar nada
como si fueran realmente
importantes.
Ahora que tengo un hombre en la mesada
no sé qué hacer con él
y las horas del almuerzo se me pasan.
(de Acetato, Educo, Neuquén, 2009)
Nos dejaron
por herencia
la idea de que todo pasado fue mejor
de que nuestras malas letras de rock
les arruinan el lenguaje que
sólo se decían en la intimidad.
Me achacan que no planche las camisas
con la misma inquietud
con la que se admiran
de que me acuesto ilegalmente
y no uso cancanes
cuando hace calor.
Ya hubo otras locas
que supieron suicidarse
o morirse
de sobredosis,
hasta las muertes están inventadas,
ni en la Patagonia desértica
podemos tener un gesto
innovador.
Ninguna presidenta como la gente,
maestras normales
pero amantes de Sarmiento,
malas costumbres
contemporáneas
y todo para que
criemos hijas
con resentimiento
pero en tiempo y forma.
(de Acetato, Educo, Neuquén, 2009)
Fotografía de Aino Kannisto |
Confundida entre lo que escucha lo que lee y lo que piensa
mirando con el cuarto del ojo una cucaracha que sube por la
ventana al sur del continente
debajo de los tres mundos
debajo de la línea de pobreza
debajo de otro departamento
eternamente abajo
bien abajo.
Cuando cree que se siente sola y solo hasta que encuentra
la dulzura de animal tierno en los dos ojos que poco a
poco le regalan un nimbo de sommiers efímero pero eficaz
descubre que hay un solo abajo que le hace bien.
(de Celuloide, Colección chicas de bolsillo N° 6,
La Plata, Editorial Universidad Nacional de La Plata, 2005)
(Zapala, Neuquén, Argentina, 1977)
Reside en Neuquén capital
POETA/DOCTORA EN LETRAS/PROFESORA
INVESTIGADORA DEL CONICET/
Premio Nacional de Poesía Alfonsina Storni (2021)
para leer + en Revista de Educación Neuquina
+ en POETAS SIGLO XXI
+ en VACONFIRMA
para leer una entrevista en LAMÁS MÉDULA
2 comentarios:
Cuánta belleza!un placer leer estos poemas tuyos Silvia...
Los quiero leer todos...Disfrutarlos uno a uno lento...abrazando no sé si toda o poco a poco esa síntesis maravillosa...Me encantan... Gracias.
impresionate, terible y bello
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