Fotografía de Lukasz Wierzbowski |
Hagamos usted y yo un largo viaje por la casa de los vivos. de esos
ejemplares que, bien conservados, preguntan de usted y de mí.
hagamos un alto en el recorrido sobre su cama para sabernos vivas,
que somos la parte parecida a las tormentosas rayas de la noche, las
que no vemos, las que no probaremos nunca. deme usted la parte de
su cuerpo, esa orilla que nadie conoce, ni siquiera las intimidades de
su baño ni los pudores discretos de su espejo. quiero acostarme con
usted a esta hora para saber que la tengo debajo de una mano, las
rodillas en su riñón, su espalda repartida
Fotografía de Lukasz Wierzbowski |
IV
Supongo que este aventurado ascenso de hoy por las inveteradas
paredes de la euforia ha de conducirme prontamente a un abismo
indescriptible. digamos que eso no tiene importancia en la medida
que podamos, usted y yo, malograr la criatura de la falta, como ha de
hacerse en las mejores poesías germanas, donde la indolencia pasa a
ser forma de duda y de tragedia para el más inmune de los hombres.
lamento ser tan angustiosamente moral y pretender que para tocar
uno sólo de sus senos tenga que decirle tanto.
(Caracas, Venezuela, 1961)
POETA/PERIODISTA
1 comentario:
¡Qué maravilla!
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