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| Fotografía de Sonia Chabas |
DESALIENTO
De acuerdo: ya no se forjan nuevos visionarios,
el exceso de amor no está de moda
ni la conversación con los sueños
y es ridículo hablar de sirenas,
de instantes tan inocuos como la brisa,
el paso de los días.
El poeta se ausenta del poema
toma café o el sol con los amigos,
se allega al mar y delgado desnuda la metáfora
entre las olas y las obligaciones del día siguiente.
¿Escribir? El poeta prefiere la piscina;
sumerge su inocencia, paladea la tarde sin noticias.
Ahí, en la hamaca indolente del silencio,
sin mito, sin pasado, su poema yace suicidado.
B O N U S T R A C K
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| Fotografía de Sonia Chabas |
PREMONICIÓN
Hablo de la fragilidad de la dicha.
Del hilo de araña que tornasol pende,
y poco a poco teje luz en la penumbra.
Filo, embriaga la oscuridad como un relámpago.
Hablo de la voz
que gota a gota resbala sudor,
estalla rocío;
espejo se enraíza aroma.
Préndese peine.
Hebra a hebra separa tiempo la ponzoña
del cansino vuelo
sin ton ni son
de la jornada peregrina.
Hablo de las manos que oráculo reptan pétalos.
Distantes efímeras mariposas
primavera bailan
arista lejanía.
Habla límite el verano.
en San Diego Poetry Annual 2010-11: The Best Poems from Every Corner of the Region,
por William Harry Harding
(La Paz, Baja California Sur, México)
Radicada en La Paz
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2 comentarios:
Alguno piensa
que tiene amada
y no tiene nada.
¿Esto es tirarse a la piscina?
Depende si se lo hiciste saber o no
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