4 de mayo de 2013

Anne Carson, Héroe (fragmento)


Rune Guneriussen (Noruega, 1977)


HÉROE

Una hora mas tarde estamos en el taxi
por una ruta vacía hacia la ciudad.
La luz de abril es clara como una alarma.

A medida que pasa nos hace sentir cada objeto
en el espacio de su propia sombra.
Me gustaría poder llevar esta claridad

al hospital, donde las diferencias se hacen planas y se confunden.
Me gustaría haber sido buena antes de que se volviera loco.
Estos son mis dos deseos.

Es difícil encontrar el principio de la demencia.
Recuerdo una noche hace unos diez años
cuando estábamos hablando por teléfono.
Era un domingo de invierno a la noche.

Escuchaba sus frases completarse con miedo.
Comenzaba una frase -sobre el tiempo, perdía el
rumbo, empezaba otra.
Me puso furiosa escucharlo balbucear-

mi padre alto y orgulloso, piloto en la II Guerra Mundial!
Sin piedad,
Me quedé al borde de la conversación,

Viendo como se retorcía buscando una señal,
Sin ofrecerle ninguna,
y como un lento derrumbe pensé

que no tenía idea de a quién le estaba hablando.
Mucho más frío hoy, supongo…
su voz arrastrada al silencio se rompió,

la nieve cayendo sobre su voz.
Hubo una larga pausa mientras la nieve nos cubría a los dos.
Bueno, no te distraigo más,

dijo de pronto con una alegría desesperada, como divisando tierra.
Buenas noches,
No quiero aumentar tu cuenta de teléfono.  Adiós.

Adiós.
Adiós. ¿Quién sos?
Le dije al tono cuando ya había cortado.


HERO 

[extract]

So about an hour later we are in the taxi
shooting along empty country roads towards town. 
The April light is clear as an alarm. 

As we pass them it gives a sudden sense of every object 
existing in space on its own shadow.
I wish I could carry this clarity with me 

into the hospital where distinctions tend to flatten and coalesce. 
I wish I had been nicer to him before he got crazy.
These are my two wishes. 

It is hard to find the beginning of dementia.
I remember a night about ten years ago
when I was talking to him on the telephone. 

It was a Sunday night in winter. 
I heard his sentences filling up with fear. 
He would start a sentence about weather, lose his way, start 
another.
It made me furious to hear him floundering

my tall proud father, former World War II navigator! 
It made me merciless.
I stood on the edge of the conversation,

watching him thrash about for cues,
offering none, 
and it came to me like a slow avalanche 

that he had no idea who he was talking to. 
Much colder today I guess. . . . 
his voice pressed into the silence and broke off, 

snow falling on it.
There was a long pause while snow covered us both.
Well I won’t keep you, 

he said with a sudden desperate cheer as if sighting land.
I’ll say goodnight now, 
I won’t run up your bill. Goodbye. 

Goodbye. 
Goodbye. Who are you? 
I said into the dial tone. 





Anne Carson 
(Toronto, Canadá, 1950)
de Glass, Irony and God, New Directions Publishing, 1995
Versión Patricio Grinberg
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3 comentarios:

Errata y errata dijo...

Sumamente difícil, sí, encontrar el principio de la demencia. Pero más difícil aun puede que sea encontrarle el final.
Un poema impresionante.
Un abrazo.

Errata y errata dijo...

Quería decirte que me alegro que hayas quitado el coso ese del Google+ en tus comentarios. Me resultaba muy incómodo. Beso.

EG dijo...

Gracias por tu opinión Maia, a mí esta mujer siempre me llama a leerla. Cada tanto encuentro algo en la web, no tengo ni un libro de ella, ni la encontré jamás en una antología.

Con respecto a lo de google +, lo usé xq pensé que se sumaban los comentarios de un lado y del otro, era una trampa!!! Y no sé cómo logré sacarlo!!! :) pero lo hice!!!

Un abrazo

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