Fotografía de Noah Kalina |
MUJERES DE ATENAS
Nosotras en tiempos de guerra,
somos unas combatientes admirables,
aunque nuestros heroísmos estén hechos
a la medida de un libro que nunca se escribió.
A veces entregamos nuestras joyas
a una causa que no entendemos del todo
pero que íntimamente detestamos,
y luego cuidamos, como siempre, de la casa
con una expresión ambigua en las mañanas,
que no es de miedo, pues no somos temerosas
aunque la visión de muelles y aeropuertos
nos estremezca hasta la náusea
y nos persiga en el sueño.
Es verdad que hilamos más que de costumbre
pero es que estas telas recias nunca alcanzan
para la vastedad de nuestros lechos.
Casi todas tenemos la tendencia
a coleccionar las cosas más triviales
como caracoles y vidrios coloreados,
y también todas pasamos muchas horas
inmóviles ante los espejos
como tratando de develar algún misterio
pero está visto que nunca es suficiente.
Sólo nosotras sabemos
cuánta amargura esconden unas manos quietas,
cuánto oscuro deseo anida en lo sereno,
cuánta violencia late en la sumisión.
Nadie nos llama por las tardes
y cuando rezamos
a la sombra del altar del sacrificio
pedimos de rodillas cosas
que pertenecen a otra tierra
y a otro cielo,
a otro modo de estar en esta piel.
Nunca hablamos con las otras del futuro
-ese terreno fatal de la esperanza-
pero frecuentamos secretamente los oráculos,
con sus vísceras sagradas,
sus hojas de eucalipto y sus sibilas,
e indagamos afanosas en el aire
cualquier signo que confirme
nuestra más íntima sospecha.
Jamás nos confesamos impotentes
pues nuestra fuerza reside en el silencio,
mas al quedarnos solas
a la orilla de la noche interminable
rogamos a los dioses una tregua
o un cambio sutil para la historia.
Alicia Torres
(Caracas, Venezuela, 1960)
de Fatal, Fundarte, Caracas, 1989
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12 comentarios:
Me recuerda, el principio, a esa obra de Kipling titulada: "La historia más bella del mundo". Donde dice, en mi edición, en la página cincuenta y cuatro y la quinta línea, donde acaba: "La más bella historia del mundo nunca podrá ser contada."
Lo recuerdo porque lo leí en el Día Internacional del Libro. Fue una bonita experiencia.
El poema, soberbio, arrollador. Tiene mucha fuerza.
Saludos, Emma
Gracias :-)
El silencio activo y la resistencia son territorios aparentemente femeninos; no por naturaleza sino por imposición ancestral.
Pocos adivinan que también alli anida el coraje.
Preciosos poemas.
Este poema enlaza con el de Dorothy Parker del otro día a la perfección. Nosotras, guardianas de lo corriente, preservando lo cotidiano para cuando la guerra....Beso
Sí Vera, se enlazan a la perfección. Es que los encontré en un archivo PDF donde se estudiaba la imagen de Penélope en la poesía. Y la elección era excelente. Alicia Torres, Yolanda Pantín, Dorothy Parker y varias más que ahora no recuerdo. Besos!
Antonio!!! :D
Hola Vanina, y claro, todo depende del cristal con que se mire...
Saludos
Antonio, leíste al público en ese día?
Sip :D
Fue hermoso. Lo que te cuento es una mentira, el texto que me gustaría haber leído en lugar de una escogido al azar de la librería donde hablba de la muerte y su culpable. Toda una lección.
Te sigo a rabiar.
Muás
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Magnifico,nadie pudo decirlo mejor.
Magnífico poema... gracias
Me llama la atención "la forma de hablar" de este poema. Como que denota riqueza, aparte de que dosifica recursos para continuar arriba. Me gusta.
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