Fotografía de Ralph Nardell |
El verde avanza. Se acerca
el campo. El resto
no tiene este paisaje.
Perritos mojados
al borde de la autopista
ven pasar los camiones de sandía,
de ganado. Un día
las chicas con bikini que llenan
los asientos los verán
con puntos negros
en la banquina. En el peligro
está la salvación.
El destino es lo parado, los pelos
secos por el mar, la piel
seca por la sal, el parador
el pelo como paja por el mar entre los
médanos. Lo digo al oído, bajo
el calor que derrite los auriculares.
Todo el sonido: tengo un deseo
una remera que dice
Dormir juntos.
en Lo humanamente posible, Poesía Argentina Contemporánea,
Editorial El fin de la noche, 2008
Selección a cargo de Clara Muschietti y Carolina Sbarovsky
para leer MÁS
y en REVISTA SOL NEGRO
1 comentario:
Yo creo que ese ese es el mejor deseo del mundo, brisa del mar y cucharita, poesía en el aire.
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