Fotografía de Laura Makabresku |
Tenemos caras que llevamos sobre nuestros hombros,
En los carnés de Identidad,
en las fotografías de recuerdo.
Tenemos caras
que rompemos en mil pedazos. que guardamos,
que escondemos y revelamos,
a las que nos acostumbramos, que aborrecemos,
que amamos
y odiamos
Tenemos Caras
que conocemos...
Decimos: ¿conocemos?
(Traducción de Pilar Garrido y Pablo Beneito)
Maram Al-Masri
(Lataquia, Siria, 1962)
Reside en París
de Cereza roja sobre losas blancas, Granada, Comares, 2002
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su BLOG
(Traducción de Pilar Garrido y Pablo Beneito)
Fotografía de Laura Makabresku |
Qué estupidez
al mínimo roce,
mi corazón se abre.
Fotografía de Laura Makabresku |
Golpes en la puerta.
¿Quién es?
Escondo el polvo de mi soledad
bajo la alfombra,
compongo mi sonrisa,
y abro.
Maram Al-Masri
(Lataquia, Siria, 1962)
Reside en París
de Cereza roja sobre losas blancas, Granada, Comares, 2002
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5 comentarios:
Decimos: ¿conocemos?
la mayor parte no las conocemos, pero ¿conocemos alguna? de verdad.
Hermoso poema.
Me resulta muy significativo siempre el origen de cada autora porque el lugar donde una nace y crece la forma tal vez de la manera más rotunda e irreversible. Me encantaría saber en qué piensa una mujer de Siria cuando escribe de las caras que esconde. Y ya vez que este poema tiene mucho que ver de alguna manera con Todas las mujeres que no soy...por eso siempre digo que la paz va a llegar de la mano de las mujeres. Porque los hombres con su ego y prepotencia, su orgullo y deseo de poder no ha hecho más que arruinarlo todo y obligarnos a esconder esas mil caras del amor que nos golpean dentro cada día.
Tenemos caras que utilizamos como máscaras. Sirven para moverse en espacios sociales. Cuidamos cada pequeño detalle. Nos acostumbramos porque nos sirve para sobrevivir y para cruzar hacia el otro lado donde está lo que amamos.
Maia dá en el clavo. Aunque en esta sociedad occidental y "progresista", la mujer tiene aún que andar haciendo malabarismos con las caras que puede mostrar y las que no. Las poses para agradar a los hombres están a la orden del día. De forma bochornosa vemos como las mujeres adoptan ese rol tan patético. Ellas que podrían optar por la libertad de ser libres como lo son ellos, sin embargo repiten y repiten "ese" rol "femenino" y machista que se les asignó.
3 años más tarde...¿dónde estára esta mujer? ¿componiendo su sonrisa aún?
Un abrazo.
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