Obra de Quint Buchholz |
Lenta apoyo en tu mano semibárbara
mi mano palidísima.
Breve, casi inmaterial,
la insólita caricia
debió asombrarte porque tu mirada
buscó a la extraña mujer desconocida.
Aún estremece mi muñeca exangüe
una piedad que no comprenderías.
(1939)
Obra de Quint Buchholz |
A UN EXTRANJERO
Acabo de leer tu libro, oh extranjero,
a quien no veré nunca.
Y aún estoy escuchando, estremecida,
tu voz de olvido y de aventura.
Tu roja voz cargada del terrible
atractivo de las cosas inseguras.
Así tu verso lúcido, que se torna
/evasivo
sin que yo logre asir su esencia oscura.
Así tu rostro claro, que de golpe,
se me enturbia.
Has encendido un fuego en la tiniebla
y huyes sin defender su llama pura.
Sé que me voy a dormir en esta noche
de cautelosa lluvia:
Tus ojos y tus versos me han traído
la pena más absurda!
(1940)
de Poemas del cuaderno de tapa de cuerina,
en Obra poética y pictórica,
en Obra poética y pictórica,
Editorial Municipal de Rosario, 2006
para leer MÁS
2 comentarios:
La parió a Emilia.
El poema A un extrangero lo leí y mi imagen acústica era de mujer, como si mientras yo lo leía con los ojos, una voz me lo leía en el marulo.
Medio que me asusté.
Por otra parte, la obra de Buchholz también es inquietante.
Una vez leí un libro al revés: en vez que él ilustrara la obra de otro, varios escritores componían su obra inspirados a partir de una obra suya que le llegaba por correo. Creo que se llamaba El libro de los libros, o algo así.
extranjero
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