Fotografía de Jody Rogac |
Porque te robaré hasta el alma, te enseñaré a bailar…
Bebe
compruebo los mensajes,
ningún mensaje nuevo,
revuelvo los cajones,
me voy de un lado a otro,
esta casa parece
un teatro vacío,
libros en los estantes,
poemas archivados,
oscuridad, silencio,
manos en los bolsillos,
compruebo los mensajes,
ningún mensaje nuevo,
me asomo a la ventana,
esta ciudad es como
tantas otras ciudades,
las mismas avenidas,
lugares que se copian
en blanco y negro el tedio,
compruebo los mensajes,
ningún mensaje nuevo,
escucho las canciones
que me hiciste aprender,
de pronto estoy bailando,
río y subo el volumen,
sobre las caderas se mueve mi falda…
abro el cuaderno,
escribo,
me asomo a la ventana
y grito mi mensaje:
nunca sabré de qué sales huyendo
los días que no vienes.
Irene Sánchez Carrón
(Navaconcejo, Cáceres, España, 1967)
de Ningún mensaje nuevo, Ediciones Hiperión, 2008
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8 comentarios:
Cuánta ansiedad en estos días...
Luego compruebas los mensajes,
ningún mensaje en la bandeja de salida,
los días que no viene.
Hermoso. Un abrazo.
casi que no recuerdo el ring de mi teléfono personal...
bellísimo, beso.
Desconfío de los teléfonos.
Gracias, Emma.
Gracias, Emma.
y hoy...quién usa los teléfonos Horacio?
Ya ni nos escuchamos siquiera la voz
Para sellar pactos (cualquiera sea el tenor de estos) nada mejor que saliva/
contra/
saliva
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