Obra de Madalina Iordache-Levay |
OBEDIENCIA
besame el corazón, pidió
entonces tomé un cuchillo
lo abrí desde la garganta
hasta el estómago
y rompiendo de a una sus costillas
hurgué y hurgué con los dedos
su tórax, hasta encontrarlo
estaba aún tibio y era rojo, grande,
hermoso como una fruta no imaginada
acerqué los labios para dar el beso más dulce de mi vida
luego cerré sus ojos
y le dije al oído
que siempre haría lo que él quisiera
LO MISMO DIGO AGUA QUE PALABRA
frente a la casa, antes de que construyeran
los edificios ostentosos
las oficinas asépticas de la calle belgrano
los negocios de chucherías
hubo un baldío
y en el centro
un malacate
íbamos con mauro lesjtch
algunas siestas, a jugar
que éramos caballos ciegos
y dábamos vueltas alrededor
del pozo seco
mauro es un hombre ahora
ha hecho dinero, hijos,
sólo persisten en él
los ojos oscuros
con pestañas de muñeca
yo sigo atada
al hábito de esas tardes
caminando el círculo del pozo
jugando al animal ciego
ahora
la sed es real
(Oncativo, Córdoba, Argentina, 1978)
Reside en Ciudad de Córdoba
POETA/LICENCIADA EN LETRAS MODERNAS/DOCENTE/TALLERISTA
de Tabaco Mariposa, Caballo Negro Editora, 2009
POETA/LICENCIADA EN LETRAS MODERNAS/DOCENTE/TALLERISTA
de Tabaco Mariposa, Caballo Negro Editora, 2009
8 comentarios:
El segundo me llega muchísimo.
Beso !
Muy bonito, Emma. Gracias.
Un beso
Muy buenos los dos.
Abrazos.
Leo
El primiero se me hace muy cercano y el segundo se me atraganta por ese extraño alimento que es la sed, y el adiós de las personas que ya no son, lo que eran.
auuuuuuuuuuu la ilustración
y el segundo bueno buenísimo
Me gusta mucho la originalidad del primero, ese tomarse las cosas tan al pie de la letra. El final del segundo es bárbaro!!! Besos
Con respecto al primero, hay que tener cuidado con lo que se desea.
Gracias por publicar estos poemas de Elena. Escribe muy bien! Los dos me gustaron mucho, pero que quedo con la brevedad de primero.
Besos!
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