Ilustración de Amanda Sandlin |
I
Por asalto.
El cielo será tomado.
El sol,
Cada rayo de sol
Por asalto.
Las partículas de polvo estelar
Y la galaxia toda
Será por asalto.
No hay otra forma.
Ilustración de Amanda Sandlin |
II
Anduvimos la tierra.
Sus combas
Sus siembras.
La reptamos.
La desgranamos.
La pulsamos.
Fertileza templada
Entre mamas.
La humedecimos
De leche.
Le embebimos los surcos.
Absorbimos cada centímetro
De tierra
En la piel raquítica.
Arruga y grieta.
Pero no es nuestra.
Ilustración de Amanda Sandlin |
III
El aire tomaremos por asalto.
Cada molécula
De sus componentes
Esenciales
El aire también por asalto.
En el momento de asirlo
Con las vías inciertas
Llegará intenso
Interminable.
Respetaremos nada.
El aire también será tomado
Por asalto.
Ilustración de Amanda Sandlin |
IV
Hemos abonado el crisol
Fundido los oficios.
Todos a uno.
Hortelana
Costurera
Médica
Todos a uno.
Talabartera
Agricultora
Lavandera
Todos a uno.
Cocinera
Enfermera
Operaria
Todos a uno.
Profesora
Bailarina
Campesina
Todos a uno.
Solo
Único
Invisible
Callado
Indefinido.
Todos a uno
En forma de madres.
Ilustración de Amanda Sandlin |
Fragua revelada
Escombros de símbolos
Armario de ropa vieja
Y explosión.
Agotamiento de sentidos
Desvirgamiento de los miedos
A tomar el cielo
El aire
El sol
La tierra
Por asalto.
¡Mujer!
B O N U S T R A C K
LA MIMO
Daniela Carrasco
Le hacía cosquillas en las axilas al aire.
Lo miraba y él sonreía.
Hacía señales de luces
Entre las ramas de los jacarandás.
Daniela Carrasco
Delgadita, puro gesto
Se pintaba de arco iris.
Se mimetizaba en el rito
De una ternura de enero
Y jugaba con los dedos,
Con la boca,
Con las cejas,
Con la nariz colorada
Con la frente muy ceñuda
Con los párpados
La pera
Y los pómulos dorados.
Daniela Carrasco
Acumulaba íconos
Y los esparcía
Con la punta de la nariz.
Pero una tarde
Daniela Carrasco, La Mimo
Artista callejera
Vestida de alondra
De maga
De amarillo
Y a rayas
Fue ultrajada
Torturada y
Colgada de una reja
En el parque
André Jarlán
Por la policía chilena.
Entonces los adoquines
Comenzaron a temblar
Por miedo, por furia
¿Se habrá visto alguna vez
A niños
Con ojos atados
A gorriones sin pico
Y la mochila vacía?
María de los Ángeles Fornero
(Carrilobo, Córdoba, Argentina, 1961)
(Carrilobo, Córdoba, Argentina, 1961)
Reside en Córdoba
POETA/DOCENTE/PSICÓLOGA SOCIAL/
PROFESORA DE LENGUA Y LITERATURA
PROFESORA DE LENGUA Y LITERATURA
para leer una reseña en EL DIARIO DEL CENTRO DEL PAÍS
Tremendos testimonios poéticos!
ResponderEliminarUn abrazo.
Hermosos poemas! Movilizan!Son como disparos! Gracias por traerla, y de Carrilobo, mi zona cordobesa.
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