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| Fotografía de Amanda Jasnowski |
TU MARIDO ME MIRA
Tu marido me mira
Yo conozco las reglas
(las impuestas por ellos)
Te veo tan frágil
tan para él y la casa.
Los tres lo sabemos:
Él es un idiota que se aprovecha de las reglas.
Tu marido me mira
y cada vez que puede se para a mi lado: Camina cerca de
mí
veo tan acuarelados tus colores
traslúcido el dolor de saberlo.
Yo conozco las reglas,
el olor dulce de su colonia,
tu perfume de esmaltes y cremas elegidas para él
que me mira y se me acerca.
No quiero diluir tu frescura, la claridad de tus pensamientos
tampoco representar el papel que ellos escribieron para
mí:
la MUJER SOLA
Que no es persona es amenaza rompefamilias activista resentida
histérica incompleta incapaz de retener a un
hombre por frígida o afiebrada puta loca tilinga arrabalera
rutera atorranta
sola
descarada
sola
sin ser lesbiana ni monja
loca
suelta
y al igual que vos sin la libertad de abrir la boca.
Siamesas de silencio ante el tirano
Yo, puta buscona: ¿Qué otra cosa podría esperarse de la
sola?
Vos, desconfiada ingrata: ¿Qué otra cosa podría esperarse
de la esposa?
Tu marido me mira
yo finjo no darme cuenta
esquivo
me aparto
náusea en la mirada
pero él es un idiota que se aprovecha de las reglas
que nos nombran
mentirosas
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| Fotografía de Amanda Jasnowski |
LA ESTAFA DE LA PROFESORA DE LENGUA Y LITERATURA
El predicado no es importante
cuando el verbo es carne
y la carne que no pelea
pasa a ser carroña
sin la posibilidad de nombrarse
sin el estigma de la palabra
Carne
músculos que repelen los epítetos
y conjugan en pasado el futuro que no llega
me sobraron las palabras para describir a mi agresor
y no me alcanzaron los sinónimos para pedir por favor
No soy la idea principal de ningún párrafo
me los subrayaron desde chica
lo secundario es el frío
en esta red conceptual
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| Fotografía de Amanda Jasnowski |
Nos carpimos
algunas veces nos hacemos eso
otras
intentamos arrancarnos de raíz.
Escapo al patio
en su presencia
y con la azada ampollo mis manos
el filo de la poesía arranca mi calma.
Cuesta andar por la ciudad
con nostalgias del monte
invadida de una imagen
deshidratada de palabras
como si fuesen agua.
Prefiero quitar los yuyos
barrer la luna
planchar la arena
ampollar mis dedos
y quedar carpida en el papel
con sus caprichos
que me develan.
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de Raspones de Minotaura, Moglia Ediciones,
Colección de Poesía Como el agua
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B O N U S T R A C K
Me visto a tientas tras el huracán.
Temo estar desnuda, con la piel de otra.
Laura Virgile
(Zárate, Buenos Aires, Argentina, 1978)
Reside en Corrientes
Reside en Corrientes
POETA/ACTRIZ/PERFORMER/PROFESORA/
MIEMBRO FUNDADORA DE COLECTIVOS ARTÍSTICOS
MIEMBRO FUNDADORA DE COLECTIVOS ARTÍSTICOS
de Raspones de Minotaura, Moglia Ediciones, Corrientes, 2020
Dirección de la Colección de Poesía Como el agua, Evelín Bochle
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Buenos poemas.
ResponderEliminarBesos.
Absolutamente brutal, impresionante la fuerza de los poemas.
ResponderEliminarGracias.