Obra de Gustav Klimt |
MUCHAS VECES HEMOS DICHO ADIÓS
Muchas veces hemos dicho adiós.
Cuando pronunciamos la etérea palabra
vuela de los labios
y el mundo rota ciento ochenta grados.
Sale, sí,
pero también se queda atrapada
en un rincón oscuro de la boca.
Obra de Vladas Orzekauskas |
DESASTRE
Relleno turbio de los días
que rozan el cascarón,
caer de todas las cosas,
amor muerto antes de nacer.
Y queda:
Tocar la superficie,
perderse en un punto infinito,
y al apretar los dientes
se llena la noche de un suspiro.
Yvonne Mendoza (Ciudad de México, México, 1957)
de Certezas equívocas, Ediciones Colectivo Poético Cardo, 2006
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No consigo concentrarme en los poemas luego de esa "toma" del cuadro de Klimt...
ResponderEliminarEntiendo Maia, es un "detalle" impresionante de Klimt.
ResponderEliminara b r a z o
Lo peor no es decir adiós, lo peor es cuando te lo dicen.
ResponderEliminarY aquí estoy, todavía no he dicho adiós, jaja.
Besos, Emma.
Quizá, cuando uno dice "adiós", está diciendo "quedate". No?
ResponderEliminarLa imagen de Klimt es por si sola un hermoso poema. Poemas cortos pero profundos como esa imagen....quedan.
ResponderEliminarUn beso