Fotografía de Dara Scully |
Hay chicas saliendo del bosque,
envueltas en capas y capuchas,
cargan barras de hierro y velas
y una multitud de cicatrices recolectadas
entre acres de hierba prematura y autobuses
urbanos, y templos y bares. Hay chicas
saliendo del bosque
con bragas amordazando sus labios,
haciendo tal ruido que es imposible
escucharlas. ¿Está hablando también el mundo?
¿Está realmente preguntando qué significa exactamente
permitir a alguien descansar en paz? Hay chicas
saliendo del bosque, levantando muy alto
sus piernas rotas, derramando secretos
desde muslos desabrochados, todas las mentiras
susurradas por extraños y entrenadores
de natación, y tíos, especialmente tíos*,
que dijeron que esparcir los restos sería fácil
y sencillo, que pusieron balas en sus pechos
y alimentaron con sus preciosos rostros al fuego,
que succionaron el barro de sus costillas y decoraron
sus ataúdes con zarzas. Hay chicas
saliendo del bosque, allanando el terreno
para esparcir sus historias. Incluso esas chicas
encontradas desnudas en zanjas y pozos,
esas olvidadas en áticos abandonados,
y enterradas en los lechos de los ríos como los sedimentos
de siglos pasados. Ellas han escapado
a rastras desde detrás de las cortinas
de su infancia, del peso dorado y rosa
de sus cuerpos al empujarlos contra el agua,
contra el ultraje triste y repleto de plumas
del recuerdo. Hay chicas saliendo
del bosque del mismo modo que los pájaros llegan
a las ventanas tempranas - picoteando
y tarareando, hasta que lo único que puedes oír
es el golpe de sus corazones minúsculos
contra el cristal, la desesperación brillante
del sonido - golpear, desaparecer.
Hay chicas saliendo del bosque.
Están llegando. Están llegando.
Traducción de Carmen Callejo
Propuesta de traducción de Emma Gunst
* "Uncle" en el poema original
GIRLS ARE COMING OUT OF THE WOODS
Girls are coming out of the woods,
wrapped in cloaks and hoods,
carrying iron bars and candles
and a multitude of scars, collected
on acres of premature grass and city
buses, in temples and bars. Girls
are coming out of the woods
with panties tied around their lips,
making such a noise, it’s impossible
to hear. Is the world speaking too?
Is it really asking, What does it mean
to give someone a proper resting? Girls are
coming out of the woods, lifting
their broken legs high, leaking secrets
from unfastened thighs, all the lies
whispered by strangers and swimming
coaches, and uncles, especially uncles,
who said spreading would be light
and easy, who put bullets in their chests
and fed their pretty faces to fire,
who sucked the mud clean
off their ribs, and decorated
their coffins with brier. Girls are coming
out of the woods, clearing the ground
to scatter their stories. Even those girls
found naked in ditches and wells,
those forgotten in neglected attics,
and buried in river beds like sediments
from a different century. They’ve crawled
their way out from behind curtains
of childhood, the silver-pink weight
of their bodies pushing against water,
against the sad, feathered tarnish
of remembrance. Girls are coming out
of the woods the way birds arrive
at morning windows – pecking
and humming, until all you can hear
is the smash of their miniscule hearts
against glass, the bright desperation
of sound – bashing, disappearing.
Girls are coming out of the woods.
They’re coming. They’re coming.
LE RAGAZZE STANNO USCENDO DAI BOSCHI
Le ragazze stanno uscendo dai boschi,
avvolte in mantelli e cappucci,
hanno sbarre di ferro e candele
e una moltitudine di cicatrici, raccolte
su ettari di erba prematura e su autobus
urbani, nei templi e nei bar. Le ragazze
stanno uscendo dai boschi
con le mutandine legate attorno alle labbra,
fanno un tale fracasso, è impossibile
non sentirle. Anche il mondo sta parlando?
Davvero sta chiedendo, Cosa vuol dire
dare a qualcuno il giusto riposo? Le ragazze
stanno uscendo dai boschi, alzando
le loro gambe rotte, su su, colando segreti
da cosce non strette, tutte le bugie
sussurrate da sconosciuti e allenatori
di nuoto, e zii, specialmente zii,
che dicevano che allargarle sarebbe stato lieve
e facile, che hanno messo pallottole nei loro petti
e hanno dato in pasto i loro bei visi al fuoco,
che ha risucchiato via tutto il fango
dalle loro costole, e ha decorato
le loro bare con sterpi. Le ragazze stanno uscendo
dai boschi, facendo spazio a terra
per sparpagliare le loro storie. Anche quelle ragazze
trovate morte nei fossi e nei pozzi,
quelle dimenticate nelle soffitte neglette,
e seppellite nei letti del fiume come sedimenti
di un secolo diverso. Sono strisciate
fuori da dietro le tende
dell’infanzia, il peso argento-rosa
dei loro corpi che spinge contro l’acqua,
contro la triste, piumata corrosione
della reminiscenza. Le ragazze stanno uscendo
dai boschi come gli uccelli arrivano
nelle finestre mattutine - beccando
e canticchiando, fino a che puoi sentire solo
l’infrangersi dei loro cuori minuscoli
contro il vetro, la brillante disperazione
del suono - frantumando, scomparendo.
Le ragazze stanno uscendo dai boschi.
Arrivano. Arrivano.
Traducción al italiano de Carlo Pizzati
Tishani Doshi
(Madras, India, 1975)
POETA/PERIODISTA/BAILARINA
para escucharla recitar este poema en LYRIKLINE
su WEB /en WIKIPEDIA
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es brutal, justo y necesario...
ResponderEliminargracias, como siempre...
Ayer me mataron.
ResponderEliminarMe negué a que me tocaran y con un palo me reventaron el cráneo. Me metieron una cuchillada y dejaron que muera desangrada.
Cual desperdicio me metieron a una bolsa de polietileno negro, enrollada con cinta de embalar y fui arrojada a una playa, donde horas más tarde me encontraron.
Pero peor que la muerte, fue la humillación que vino después.Desde el momento que tuvieron mi cuerpo inerte nadie se preguntó donde estaba el hijo de puta que acabo con mis sueños, mis esperanzas, mi vida.No, más bien empezaron a hacerme preguntas inútiles. A mi, ¿Se imaginan? una muerta, que no puede hablar, que no puede defenderse.
¿Qué ropa tenías?
¿Por qué andabas sola?
¿Cómo una mujer va a viajar sin compañía?
Te metiste en un barrio peligroso, ¿Qué esperabas?
Cuestionaron a mis padres, por darme alas, por dejar que sea independiente, como cualquier ser humano. Les dijeron que seguro andábamos drogadas y lo buscamos, que algo hicimos, que ellos deberían habernos tenido vigiladas.
Y solo muerta entendí que no, que para el mundo yo no soy igual a un hombre. Que morir fue mi culpa, que siempre va a ser. Mientras que si el titular rezaba fueron muertos dos jóvenes viajeros la gente estaría comentando sus condolencias y con su falso e hipócrita discurso de doble moral pedirían pena mayor para los asesinos.
Pero al ser mujer, se minimiza. Se vuelve menos grave, porque claro, yo me lo busqué. Haciendo lo que yo quería encontré mi merecido por no ser sumisa, por no querer quedarme en mi casa, por invertir mi propio dinero en mis sueños. Por eso y mucho más, me condenaron.
Y me apené, porque yo ya no estoy acá. Pero vos si estas. Y sos mujer. Y tenes que bancarte que te sigan restregando el mismo discurso de "hacerte respetar", de que es tu culpa que te griten que te quieran tocar/lamer/ chupar alguno de tus genitales en la calle por llevar un short con 40 grados de calor, de que vos si viajas sola sos una "loca" y muy seguramente si te paso algo, si pisotearon tus derechos, vos te lo buscaste.
Te pido que por mí y por todas las mujeres a quienes nos callaron, nos silenciaron, nos cagaron la vida y los sueños, levantes la voz. Vamos a pelear, yo a tu lado, en espíritu, y te prometo que un día vamos a ser tantas, que no existirán la cantidad de bolsas suficientes para callarnos a todas.
Guadalupe Acosta
https://www.facebook.com/guadalupe.acosta.58
Me encanta esta poeta -a la cual descubrí aquí hace apenas un par de días; gracias por ello-. Lástima que haya tan poca cosa traducida de ella al español.
ResponderEliminarSaludos.
Un poema hermoso, profundo y tan actual. No conocía a la poeta. La leeré.
ResponderEliminarUn abrazo.