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| Fotografía de Youichi Shidomoto |
XIV
dicen las mujeres...
dije,
yo dije:
...la misma mano, la misma mano
decimos:
la misma mano que me acaricia, me golpea
y mis ojos,
los mismos ojos
que lo veían sonreírme,
lo vieron abalanzarse...
se vieron, muerte
en sus ojos: los ojos fríos de un más allá
la nieve
cubre las huellas del lobo,
esto pasó
del horror al silencio como la nieve,
pero está escrito en mis rodillas, en mi pecho:
la muerte es la muerte como el amor,
como la locura:
el lobo gira en círculos
y ahora
estos ojos míos, ¿qué hacen, qué dicen
qué ven
qué lloran
qué perdonan
qué olvidan?
¿sus disfraces, el espejo roto
la ceguera de las mariposas?
una niña amenazada por un ruiseñor,
dos niñas amenazadas por un ruiseñor...
tres...
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| Fotografía de Youichi Shidomoto |
NUBE
como un niño pincha el cadáver de una mariposa
así mira el cuerpo desnudo
así examina a la dulcísima imperfecta vida
así se extiende su pensamiento sobre el mundo
(Buenos Aires, Argentina, 1951)
El primero desasosiega y a la vez es hermoso. El segundo sublime y delicado. Beso
ResponderEliminarYo estuve ahí. Me alegra volver a leerte. Besis
ResponderEliminarCuanta inmensidad encierra la metáfora de la mariposa....
ResponderEliminarEs cerrar los ojos un instante y que absolutamente todo sea posible.
amo a esta señora.
ResponderEliminarlamentablemente la conocí hace poco
pero es mía como de toda la vida