17 de mayo de 2012

Anna Swir, 3 poemas 3


Fotografía de Natasha Gudermane

GOLPEÉ MI CABEZA CONTRA EL MURO

De niña
puse la mano en el fuego
para convertirme
en santa.

De adolescente
golpeé mi cabeza contra el muro
cada día.

De joven
salí al tejado
por un tragaluz
para saltar.

Ya mujer
tuve el cuerpo lleno de piojos.
Cuando planchaba mi jersey
crujían.

Esperé sesenta minutos
para ser ejecutada.
Pasé hambre
seis años.

Luego tuve un hijo,
me extrajeron de mí
sin anestesia.

Luego un rayo me mató
tres veces
y tuve que surgir de entre los muertos
tres veces
sin ayuda.

Ahora estoy aquí
descansando
de resucitar tres veces.

I KNOCKED MY HEAD AGAINST THE WALL

As a child
I put my finger in the fire
to become
a saint.

As a teenager
every day I would knock my head against the wall.

As a young girl
I went out through a window of a garret
to the roof
in order to jump.

As a woman
I had lice all over my body.
They cracked when I was ironing my sweater.

I waited sixty minutes
to be executed.
I was hungry for six years.

Then I bore a child,
they were carving me
without putting me to sleep.

Then a thunderbolt killed me
three times and I had to rise from the dead three times
without anyone’s help.

Now I am resting
after three resurrections.


Fotografía de Natasha Gudermane

YO PINTANDO

Por qué hablar
si se puede gritar
por qué andar
si se puede correr
por qué vivir
si uno puede abrazarse.

Corro y chillo de alegría
corro y chillo
por desesperación
estoy pintando
mis pulmones trabajan como locos.

Sentir intensamente
es bueno, o eso dicen, para la salud.



Fotografía de Natasha Gudermane

MÁTAME

No me beses, mi amor.
No me abraces, mi amor.
Si me amas, mi amor,
mátame.
KILL ME

Do not kiss me, my love.
Do not hold me, my love.
If you love me, my love,
kill me.






Anna Swir – Świrszczyńska- 
(Varsovia, Polonia, 1909-1984)
Traducción del inglés de Abraham Gragera
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8 comentarios:

  1. Luego tuve un hijo,
    me extrajeron de mí
    sin anestesia.


    es exacto lo que pienso sobre la maternidad, la extracción de una misma... me llevó a eso, quiero decir.

    Abrazos

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  2. No creo que haya persona que ame tanto la vida como los que son un poco suicidas.

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  3. La vida es un constante golpearse contra el muro. Y el arte son los regueros que dibujan los líquidos que supuran esas cabezas golpeadas....No puedo recordar las veces que me mataron de amor, ni tampoco las veces que de amor me resucitaron...Es muy particular esta voz, me gusta. Besos!!

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  4. Sin embargo...renuncian a ese amor.

    Algo falla

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  5. Emma, si lo preguntás por mi comentario la respuesta es que no lo creo, porque esta mujer me da que amaba la vida. Pero al leer sus poemas sentí cierta desesperación masoquista, la búsqueda del dolor, del sentir intenso adrede - tal vez necesaria.

    "De niña
    puse la mano en el fuego
    para convertirme
    en santa.

    De adolescente
    golpeé mi cabeza contra el muro
    cada día.

    De joven
    salí al tejado
    por un tragaluz
    para saltar."

    No me hagas caso, son cosas mías. Boludeces que se me pasan por la cabeza.
    Besos.

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  6. Si Maia, era por lo que escribiste, claro. Perdón, estoy dormida aún (no puse tu nombre!).

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  7. Parturienta


    Cualquier cosa
    que sale de este cuerpo
    es mía.

    SOLEDAD CASTRESANA
    (La Pampa, Argentina, 1979)

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