Vía Yein |
EL MILAGRO DE LA NIEVE
Se apagó la llama de la alegría.
Otra vez.
Y de pronto cuando nevó...
Qué pasó?
Eh?
No pasó nada...
Sólo lloré por bronca
Por rabia
Por decir y repetirme
¿Por qué?
¿Por qué lo conocí?
Cualquier persona más vulgar hubiera sido menos dañina.
Cualquier persona de las que él se avergüenza con que yo salí.
Y mi venganza...
Es decirle.
Que ellos eran menos dañinos para una persona como yo.
Porque nunca nos hubiéramos enamorado.
Con ellos era un juego bobo y que a veces dolía
Pero en la escala de los dolores del alma
Era un dolor menor.
Como cuando un niño pierde en un juego.
Era un dolor que al otro día se olvidaba
Que al otro día una podía elegir negar
Y con sólo desear no verlo el dolor no se sentía.
Ahora... no hay hueco donde esconderse
No hay ni un segundo brillante.
Recorro el día y el barrio.
Hago cosas livianas y coloridas
y en todas y en todos lados está el dolor.
Me baño con agua bien caliente,
Huelo flores para que su perfume me saque.
Y nada compite con mi dolor.
Ayer veía la nieve caer como un milagro
Como ese milagro que se le permite ver a una moribunda
a una chica triste a punto de apagarse.
La disfruté caer con tristeza
Pero sentí que la nieve era compasiva conmigo
y eso me consolaba:
La vi caer con suavidad
en un torbellino de algodón.
La vi hacer todas las escalas que le corresponde hacer a la nieve
para que yo vea que era nieve de verdad.
Hasta que me distraje...
Pero luego
me atacó por la espalda nuevamente la tristeza.
Cecilia... Esto es un poema?
O es lo que me pasa?
Fernanda Laguna
(Hurlingham, Buenos Aires, Argentina, 1972)
POETA/ARTISTA PLÁSTICA/ESCRITORA/CURADORA
de Luz artificial, Buenos Aires-Bahía Blanca, año I, nº I
Revista de la Editorial Vox y Mansalva
para leer MÁS
su BLOG
A veces el dolor no tiene límite y este poema lo refleja muy bien...
ResponderEliminarUn abrazo
Ana
Las dos cosas, al final, me parece, digo...
ResponderEliminarPor favor amiga que poemaaaa!!!!
ResponderEliminarTan triste, tan hermoso.
Lo comparti en FB.
Abrazo!
Uuuuuffffff si, qué dolor!! me lo llevo también! No al dolor, que ya estuvo instalado demasiado tiempo y lo estoy aprendiendo a enfriar con la nieve del tiempo. Al poema.
ResponderEliminarBeso
si, es un poema y es, lo que te pasa.
ResponderEliminarque maravilla...
ResponderEliminarMe encanta cuando empieza a hablar de la nieve. Esa parte es muy hermosa. Besos
ResponderEliminar¿Quién es Cecilia?
ResponderEliminares broma, es broma. ¡Yo sé quién es Cecilia! Es mi mejor amiga. A la que le lloro todo desde los 12 años (como Fernanda).
ResponderEliminarPero es así Maia! Al menos creo saber que "Cecilia", es Cecilia Pavón, su gran amiga y poeta también.
ResponderEliminarLindas coincidencias!
ABRAZO
Supongo que todas tenemos una de esas coincidencias, cada cual con su nombre :)
ResponderEliminarUn beso.