"Broken", fotografía de Shapovalov |
DE TODOS MODOS
De todos modos,
mientras a pocos metros un hombre es apaleado hasta morir,
a este lado de las cosas, el comercio de ropa de moda
inaugura nuevas tiendas por toda la ciudad.
Pronto estará todo lleno de ellas,
y caminaremos con naturalidad
entre estanterías repletas y cajas registradoras.
La enfermedad es la fiebre que nos hace escribir "normalidad"
en las páginas de una contabilidad extraña.
NO DE ESTE MODO
No será desde luego
hundiendo el tenedor
en el corazón de las golondrinas
como nos alimentaremos de libertad.
(de La Nieve en los manzanos, Miguel Gómez Ediciones, Málaga, 2000)
Julia Otxoa
(San Sebastián, España, 1953)
(San Sebastián, España, 1953)
Materialismo, cómo no.
ResponderEliminarCon la condición de que sea lo suficientemente dialéctico.
Es decir, que sepa usar hábilmente el corazón y la cabeza,
el alma, el cuerpo, la vida y la muerte,
Que no evite preguntar sobre cosas definitivas,
Y considere igual de importante los argumentos de los creyentes y no creyentes.
28 de Noviembre de 2002
Tierra inalcanzable
La primera página abierta al azar, nada más leer este poema.
Ay, Emma el segundo me ha dolido mucho... ese tenedor tan brusco!! La libertad solo puede alimentarse autofagozitándose.
ResponderEliminarbesos
Aquellas espaldas. Una cosa erótica hundida en la existencia,
ResponderEliminarY la manos se enredaban en trenzas pelirrojas
Tan espesas que, peinadas, hacían bajar la cabeza.
Un muslo y debajo, el pie, otra pierna,
Porque está sentada, entreabriendo las rodillas dobladas,
Y el movimiento de los brazos descubre una línea en el pecho,
Aquí, sin dua, en un siglo y en un año
Que ya se han sucedido, ¿Cómo alcanzarla?
¿Y cómo alcanzar aquella otra con un peignoir amarillo?
Se pinta las pestañas ante el espejo y canta.
Una tercera está en la cama, fuma un cigarrillo
Y mira una revista de moda. Su camisa
de muselina transluce una blancura abundante y redonda
Y unos pezones rosados. El sombrero del pintor
Cuelga entre los vestidos en el entresuelo.
Le gustaba sentarse aquí, hablar, dibujar
Acre en el sabor es nuestro trato humano
A causa de un tacto conocido, de labios ávidos,
de la forma de las caderras y el saber sobre la mortalidad del alma.
Viene y se va, una ola, la lana, vilna,
Y solo una cabellera pelirroja brilló en el abismo.
"Los pasteles de Degas"
Comparto la emoción de Aka con el segundo. Me parece un poema soberbio. Y me encantó la foto. Besos
ResponderEliminarTan real Emma.. este mundo es tan hostil que duele solo de pensarlo, hostil, injusto y no se cuantyas cosas mas... La fotografia es exelente!
ResponderEliminarun abrazo!
No se puede creer el segundo poema! Increíble. Lo anoté en mi cuaderno gloria y todo...un abrazo
ResponderEliminarauuuuuuuuuuu
ResponderEliminarqué rebuenos estos dos
Si algún poeta o buscador de oro trata de hincar su tenedor en mi corazón, le leo el viejo y nuevo testamento para que recite en su Club del Progreso. Saludos Emma, ojalá tengas buonasera.
ResponderEliminarCreo que he perdido la noción del término normalidad.
ResponderEliminarCiertamente, esa no es la mejor forma de acceder a la libertad.
ResponderEliminarGracias Antonio! son bellísimos!
ResponderEliminarAhí está Darío! también yo elijo esa frase...: "La enfermedad es la fiebre que nos hace escribir "normalidad"
ResponderEliminaren las páginas de una contabilidad extraña."
Gracias Itza!!! Vera!!! CCRider!!! Laura y Costa sin mar!!!
Muy discepoliano; la biblia y el calefón.
ResponderEliminarAyer, el alcalde de Vilna aplastó con un tanque un coche aparcado en un carril-bici ;-)
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